Suminagashi, la tinta que flota en el agua
es un arte japones que comenzo a principios del siglo XII.
El artista con un pincel y tinta, toca ligeramente la superficie del agua, lo cual crea un circulo;
después en el mismo lugar con otro color, o con un dispersante (jabón) que es actúa como una tinta invisible, se crean formas simples que pueden complicarse con el movimiento que produce el aire.